Hay una marcada diferencia entre el mortero seco y el in situ o hecho en obra; el primero sale de fábrica, con la predosificación de todos sus componentes, así como prescripciones técnicas y la normativa vigente.
Lo que quiere decir que es mucho más seguro adquirir y utilizar un mortero seco que hacerlo en la obra.
De hecho, en términos de qué es más redituable, el mortero seco tiene las de ganar, pues aunque es más caro adquirirlo, te brinda la seguridad que requiere la obra, además de evitar desperdicios y en general, agilizar procesos dentro del proyecto.
Ahora, hay diferentes tipos de mortero seco. A continuación te describimos los más importantes:
Morteros comunes
Se les conoce de esa manera a los morteros que sirven para pegar las paredes o muros de ladrillo o bloques.
Generalmente están hechos de cemento, yeso, de cal o mixtos. Asimismo, cuando son predosificados, cada uno de los componentes son controlados y diseñados para garantizar la durabilidad, impermeabilidad, plasticidad y adherencia que requiere la obra.
Morteros monocapa a color
Con este tipo de morteros se busca que puedan utilizarse en fachadas de edificios sin la necesidad de utilizar pintura en el futuro, es decir, están diseñados para colocarse de acuerdo a la tonalidad del edificio.
Mortero cola
Como su nombre lo indica, son morteros especiales para pegar piezas, y son muy utilizado a la hora de trabajar con cerámica en suelos y en paredes. Generalmente a este tipo de morteros se les añade ciertos aditivos como la resina.
Morteros expansivos, refractarios o impermeabilizantes
Gracias al uso de aditivos se puede conseguir que el mortero no tenga retracción en su proceso de fraguado, y dan como resultado morteros expansivos.
Asimismo, con el uso de estos aditivos, se pueden crear morteros que soporten altas temperaturas (refractarios) o que ayuden a repeler el agua (impermeabilizantes).
Como ya mencionamos anteriormente, el uso de este tipo de morteros secos predosificados trae consigo una serie de ventajas.
Por ejemplo, a nivel proyecto:
- Te proporcionan mucha versatilidad, es decir, los puedes usar para diferentes necesidades reduciendo el costo por otros materiales.
- Tienes la certeza de que hay un control exhaustivo detrás de los morteros.
- La calidad está verificada y ha pasado por pruebas de laboratorio.
A nivel obra, te brindan:
- Un mejor manejo de los costos.
- Disminución del espacio dedicado en la obra para el acopio y sectorización de materiales.
- Obtienes una obra más limpia.
- Tener la seguridad de que es un producto con alta durabilidad.
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